Washington, D.C. — En una nueva muestra de su política proteccionista, el expresidente y actual candidato presidencial Donald Trump anunció este martes la imposición de un arancel del 50 % a las importaciones de cobre y advirtió sobre un posible gravamen del 200 % a productos farmacéuticos si las empresas del sector no trasladan su producción a Estados Unidos en un plazo máximo de año y medio.
El anuncio se dio durante una reunión de la gabinete en la Casa Blanca, donde Trump explicó que la medida busca fortalecer la producción nacional del cobre, considerado estratégico para sectores como la electrónica, el transporte, las energías renovables y la defensa. Esta decisión ocurre tras una investigación iniciada en febrero bajo la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial, la misma que justificó no aanteriormente los aranceles al acero y aluminio.

Trump también advirtió a las empresas farmacéuticas que enfrentan una disyuntiva: regresar su manufactura a territorio estadounidense o asumir un arancel del 200 % sobre medicamentos importados. El exmandatario culpó a administraciones anteriores por permitir la deslocalización de industrias clave y recalcó que su gobierno no permitirá dicha dependencia en sectores esenciales.

El impacto del anuncio fue inmediato. Los futuros del cobre en la Bolsa de Nueva York subieron hasta un 17 %, marcando su mayor alza intradía desde 1988. Según estimaciones de Bloomberg, los nuevos aranceles podrían generar ingresos por más de 300 mil millones de dólares hacia finales de 2025.
La medida se produce en medio de negociaciones con socios comerciales clave. La fecha límite para establecer nuevos acuerdos es el 1 de agosto, aunque ya se han alcanzado compromisos preliminares con países como China, Reino Unido y Vietnam.